Alexandro Ferrari: “fue como cumplir un sueño, conocí España a través de Palma, y me dije: “Un día yo ganaré esta Copa, y en el 2006, lo hice realidad”
El Dehler 36 representará a la Costa Blanca en la regata más internacional
El Dehler 36 Aquasonic, de Alessandro Ferrari, con base en el CN de Altea, vuelve a la Bahía de Palma con un objetivo claro: revalidar el título de campeón de la Copa del Rey que consiguió en la edición del 2006.
Apadrinado por el presidente de la Diputación de Alicante, El Aquasonic, representará a la Costa Blanca en una competición, cuya historia está íntimamente ligada con la del armador del barco alicantino.
Alessandro Ferrari: “Yo llegué a España en 1982. Lo primero que conocí fue Mallorca, donde se estaba disputando la Copa del Rey de Vela. Era también el año del mundial de fútbol que ganó Italia. Mallorca y España me robaron el corazón; Italia ganaba el Mundial y yo me dije: Y yo, algún día ganaré también esta Copa del Rey. Y cuando la Copa del Rey de Vela cumplió 25 años, yo cumplí mi sueño”
Alessandro Ferrari nació en el norte de Italia, entre Milan y Turín, y su vida está llena de anécdotas, y de aventuras, pero también llena de mar.
Pocos de cuantos le conocen y le han visto a bordo del Aquasonic pueden sospechar, que el patrón el IMS 670 llegó a ser uno de los personajes más significativos del mundo de la moda. Por sus manos han pasado los modelos más espectaculares, las creaciones que marcaron época y se ha codeado con los primeros diseñadores internacionales, al tiempo que vestía a las artistas más punteras que se hacían célebres en la Televisión Española en la década de los 80.
Tras la crisis del 92, que también afectó fuertemente al sector de la moda, Alessandro Ferrari cambió de negocio y de residencia. Se instaló en Altea, y aplicó sus conocimientos de Ingeniería al tema del agua y la climatización de piscinas.
Este cambió también le permitió reencontrarse con una pasión, el mar, y volver a navegar en Crucero.
Una ambición que pocos han llegado a conseguir
La Copa del Rey de Palma de Mallorca ha sido un reto para muchos navegantes y armadores. Para Alessandro Ferrari era una ambición, un sueño al que ya se había acercado en ocasiones anteriores. “En el 2004, como Blue Ferrari nos quedamos segundos, fuimos líderes hasta el último momento y al final, nos quedamos segundos. En el 2005, como Mutua madrileña, nos quedamos terceros, fue el primer acercamiento de este patrocinador al mundillo de la vela… El año pasado cuando me encontré con su presidente le dije: “Este año la ganaré” y ganamos.
El Dehler 36 representará a la Costa Blanca en la regata más internacional
El Dehler 36 Aquasonic, de Alessandro Ferrari, con base en el CN de Altea, vuelve a la Bahía de Palma con un objetivo claro: revalidar el título de campeón de la Copa del Rey que consiguió en la edición del 2006.
Apadrinado por el presidente de la Diputación de Alicante, El Aquasonic, representará a la Costa Blanca en una competición, cuya historia está íntimamente ligada con la del armador del barco alicantino.
Alessandro Ferrari: “Yo llegué a España en 1982. Lo primero que conocí fue Mallorca, donde se estaba disputando la Copa del Rey de Vela. Era también el año del mundial de fútbol que ganó Italia. Mallorca y España me robaron el corazón; Italia ganaba el Mundial y yo me dije: Y yo, algún día ganaré también esta Copa del Rey. Y cuando la Copa del Rey de Vela cumplió 25 años, yo cumplí mi sueño”
Alessandro Ferrari nació en el norte de Italia, entre Milan y Turín, y su vida está llena de anécdotas, y de aventuras, pero también llena de mar.
Pocos de cuantos le conocen y le han visto a bordo del Aquasonic pueden sospechar, que el patrón el IMS 670 llegó a ser uno de los personajes más significativos del mundo de la moda. Por sus manos han pasado los modelos más espectaculares, las creaciones que marcaron época y se ha codeado con los primeros diseñadores internacionales, al tiempo que vestía a las artistas más punteras que se hacían célebres en la Televisión Española en la década de los 80.
Tras la crisis del 92, que también afectó fuertemente al sector de la moda, Alessandro Ferrari cambió de negocio y de residencia. Se instaló en Altea, y aplicó sus conocimientos de Ingeniería al tema del agua y la climatización de piscinas.
Este cambió también le permitió reencontrarse con una pasión, el mar, y volver a navegar en Crucero.
Una ambición que pocos han llegado a conseguir
La Copa del Rey de Palma de Mallorca ha sido un reto para muchos navegantes y armadores. Para Alessandro Ferrari era una ambición, un sueño al que ya se había acercado en ocasiones anteriores. “En el 2004, como Blue Ferrari nos quedamos segundos, fuimos líderes hasta el último momento y al final, nos quedamos segundos. En el 2005, como Mutua madrileña, nos quedamos terceros, fue el primer acercamiento de este patrocinador al mundillo de la vela… El año pasado cuando me encontré con su presidente le dije: “Este año la ganaré” y ganamos.
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